Casi con toda seguridad nuestra chica con síndrome de down no sera una famosa maestra pastelera.
Pero si puede ser una excepcional e imprescindible ayudante de repostería.
Puede que no se lleve los honores ni ponga la guinda al pastel, pero si que puede ser la que amase y endulce los cupcakes que luego saborearan y apreciaran cientos de personas.
Solo hace falta dar la oportunidad.
Totalmente de acuerdo, y sin la masa amasada no se podrá poner la guinda!
ResponderEliminarSerá un responsable ayudante de repostería! Y la más linda!
Un abrazo!
O sí lo será, porque el futuro no está escrito y no se puede poner puertas al mar.
ResponderEliminarHay que evitar las negaciones. es intranscendente lo que no será. Lo importante es que será y vosotros estaréis ahí para apoyarla, acompañarla y sentiros orgullosos y dichosos de sus logros.
Pues claro que si!!! Además será una estupenda cocinera-pastelera.... Y está muy guapa. Unabrazo
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